“Alexa, pon mi playlist de rock”. “Ok Google, apunta leche en la lista de la compra”. “Siri, agéndame la cita con el dentista para el próximo viernes”. Seguro que os suena alguna de estas situaciones. Los asistentes virtuales copan las conversaciones y ya no son simples altavoces para escuchar el nuevo disco de Billie Eilish.

Estamos ante un mercado en constante crecimiento y que va a seguir aumentando gracias a la implementación del español, segundo idioma más hablado en el mundo, en los distintos speakers. La principal barrera de expansión ha sido obvia: el idioma. Cada speaker debía aprenderlo y ajustar sus comandos a cada uso regional. Una batalla en la que los parlantes chinos han jugado con desventaja. Amazon Echo o Google Home apenas han tenido que traducir e implementar comandos, mientras que Xiao AI...

UN J.A.R.V.I.S. PARA CADA UNO

El asistente virtual de Xiaomi se ha visto obligado a readaptar algunas de sus funciones. Nada que una comunidad devota e insistente y un soporte regional a través de tienda oficial no puedan superar. Lo que comenzó con Mi Speaker como una implementación timorata ha resultado ser una herramienta idónea para consolidar hábitos como cepillarse los dientes, ayudarnos a leer antes de dormir, encender una luz de noche para los peques más asustadizos, meditar con sonidos ambientales, gestionar alarmas o listas de la compra y, cómo no, escuchar mucha música a través de los servicios de streaming.

El Xiaomi Mi Speaker Mini va más allá: es capaz de leer y reproducir más de 35 millones de audiolibros y canciones. Por su parte, el Xiaomi XiaoAI Speaker HD ofrece sonido HiFi de 360 grados, procesador de señal digital (DSP) y el Touchscreen presenta una pantalla táctil de 4 pulgadas, con la que controlar nuestra smart home, realizar videoconferencias o abrir vídeos para seguir un tutorial y no olvidar ningún paso en una receta.

Gracias a estos tres productos, Xiaomi ha conseguido la nada desdeñable cifra de 50 millones de usuarios activos al mes de sus asistentes de IA.